deia.com | 08-03-2018

Vecinos que no pagan por insolvencia, comunidades con un grado importante de vivienda vacía, problemas convivenciales y situaciones de desamparo por una soledad que les paraliza a la hora de tomar decisiones. Estas son algunas de las causas que pueden influir para que un edificio se vaya deteriorando poco a poco por falta de compromiso a la hora de realizar los trabajos necesarios.

Para solucionarlo, Surbisa pensó hace diez años en aportar una solución que pasa por un mediador, un administrador de fincas concretamente, en las viviendas de su ámbito. Su objetivo: mediar en estos conflictos.

Hasta la fecha han intervenido en 41 edificios en los que han resulto los conflictos. “El resultado ha sido tan importante que nos ha animado a revalidar este programa en Bilbao La Vieja y se ha extendido a Atxuri y a todos los ámbitos de actuación de esta sociedad”, anuncia Marta Ibarbia, directora de la sociedad para la rehabilitación, Surbisa.

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