La coordinadora de parentalidad, Cristina Equiza, explica que está nueva figura profesional necesita de una estructura marcada para operar. La cual de sensación de seguridad tanto a las familias como a los entes que la van a necesitar
La psicóloga y coordinadora de parentalidad, Cristina Equiza, destaca que es necesario que los coordinadores establezcan un estilo de funcionamiento común. El cual se base en una estructura marcada, independientemente de que cada uno tenga una forma de actuar. Pero que se base en pautas comunes, las cuales aporten seguridad tanto a las familias que van a necesitar el servicio de los profesionales. Como de los entes que van a reclamar el servicio, es decir, la red judicial.
Cristina Equiza, miembro de la junta directiva de Acopar, participó en el 2º Encuentro de Coordinadores Parentales que se celebró en Madrid el pasado 9 de marzo. Hay que recordar que el coordinador de parentalidad aún no está asentado en nuestro país, por lo que hay que resaltarlas jornadas y encuentros de profesionales de la coordinación para promover la profesión, explicó Equiza.
«Somos pocos y nuevos, nos tenemos que nutrir de las experiencias de unos y otros», anotaba Cristina Equiza
«Poner en práctica los conocimientos que tienes; compartir dudas; experiencias de vida relatadas de los que estamos trabajando en la coordinación de parentalidad«; son algunas de las aportaciones de las jornadas como el 2º Encuentro de Profesionales de la Coordinación Parental. La práctica es necesaria en esta profesión, al igual que contar con una formación teórica adecuada.
Cristina Equiza apuntó también a la necesidad de que está figura profesional tome relevancia en el ámbito judicial. Destacó que la coordinación de parentalidad tiene una finalidad clara de preservar al menor envuelto en el conflicto, al igual que el resto de entes relacionados.
Es necesario «poner orden al nuevo sistema familiar, donde la finalidad sea preservar al niño o niña de hoy y adulto de mañana», recalcó Equiza.
Asimismo, la profesional también resaltó la importancia de los equipos multidisciplinares. «Estos pueden aportar mejores soluciones«; hay que recordar que «se trabaja con familias con alto conflicto y requiere de una formación multidisciplinar«.