La justicia restaurativa y la justicia retributiva tienen claras diferencias que se basan en la forma de actuar ante un conflicto o delito
La Justicia Retributiva, también conocida como punitiva o castigadora, es aquella basada en el cumplimiento de leyes establecidas por el Estado. Por su parte, la justicia restaurativa no es un modelo en sí sino una forma de ver la justicia.
Jean Schmitz es experto en la resolución de conflictos alternativa y docente del Experto Universitario en Prácticas Restaurativa. Este establece una serie de aspectos a tener en cuenta para diferenciar estos dos tipos de justicias:
Delito/Conflicto
El primer aspecto a tener en cuenta para saber de qué tipo de justicia estamos hablando es el delito o conflicto que da lugar al problema. La justicia retributiva establece el delito como un acto en contra de las leyes que establece el Estado, el cual es la «víctima». Por su parte, en la restaurativa el se habla de un conflicto, en el que hay un acto en contra de las personas, de la comunidad. Tiene un enfoque «más humano en el que se trata como un daño a las personas y que provoca que se quiebren las relaciones», anota Schmitz.
Proceso
El proceso desde la visión punitiva divide a personas, crea conflictos entre los implicados. Por su parte, desde la perspectiva restaurativa lo que se busca es reconstruir las relaciones entre víctima y victimario.
Culpa/Responsabilidad
En la retributiva se establece la culpa, se dice quien es el culpable y se busca castigarlo. Por su parte, la justicia restaurativa busca que la persona que comete el delito tome conciencia y asuma su responsabilidad. Se habla de responsabilidad y no de culpa.
Actores
Los actores en la justicia retributiva y justicia restaurativa también son diferentes. Mientras que en la primera, la castigadora, tienen un papel esencial los jueces, fiscales y otros agentes que son los que establecen el delito. En la segunda, los protagonistas son las personas en conflicto, a las que se busca empoderar.
Víctima
La última diferencia entre estas dos es sobre la víctima que sufre el delito. En el caso de la punitiva, la víctima en muchas ocasiones no es tenida en cuenta, incluso se tiende a «victimizarla». En la restaurativa, en cambio, la víctima tiene un papel principal. Esta se tiene en cuenta en todo el proceso, tanto sus derechos como necesidades.
La justicia restaurativa tiene como fin la resolución alternativa de conflictos. Los facilitadores son aquellos que se encargan de aplicar las prácticas restaurativas en este tipo de problemáticas basadas en el diálogo. Ya puedes formarte como Experto en Prácticas Restaurativas y conocer las herramientas para convertirte en facilitador.