El Gobierno danés ha establecido un curso de tres meses que las parejas con hijos menores que quieran separarse han de superar
Dinamarca es uno de los países con más divorcios en Europa, la mitad de los matrimonios terminan solicitando esta separación. Hasta ahora se trataba de un trámite burocrático fácil que solo requería un documento online. Bajo un paquete de legislación que entró en vigor en abril, las parejas que decidan divorciarse tendrán que pasar un curso y recibir asesoramiento antes de que su matrimonio pueda ser disuelto.
Estas iniciativas establecidas en Dinamarca para divorciarse han sido bien recibidas tanto por el público como por los políticos daneses, y solo el pequeño partido de la Alianza Liberal los criticó por ser excesivos. Aunque en algunos países pueden considerarse como una intrusión estatal no deseada en la vida privada de los ciudadanos.
“Es bueno tanto para la pareja individual como para el municipio: la prevención siempre es mejor que curar”, ha explicado Jette Haislund, jefa del departamento de atención médica en el municipio de Ringkøbing-Skjern en el oeste de Dinamarca, una de las primeras autoridades locales en experimentar con parejas. terapia.
La nueva medida aprobada consiste en un curso de cooperación que puede realizarse a través de una aplicación online y tres meses de terapia de pareja. “Se trata de reducir los costos humanos y financieros del divorcio”, ha explicado Gert Martin Hald, psicólogo y profesor asociado de salud pública en la Universidad de Copenhague que ayudó a diseñar el curso de asesoramiento, que ahora es obligatorio para todas las parejas con hijos menores de 18 años antes. Solo una vez superado este curso las parejas de Dinamarca que deseen divorciarse podrán acceder a este trámite.
Curso que invita a la reflexión
Los padres pueden adaptar su curso individualmente a partir de 17 módulos de media hora que ofrecen soluciones concretas a posibles áreas de conflicto durante el proceso de divorcio, incluyendo cómo manejar las fiestas de cumpleaños o cómo hablar con un ex compañero cuando está enojado.
“Se trata de entenderse a sí mismo, de las reacciones de usted y de sus hijos, y de sobrellevar la situación, la crianza conjunta, después del divorcio”, ha apuntado Hald. “Ayuda a lidiar con el estrés, la ansiedad, la depresión y reduce la cantidad de días que faltan al trabajo”.
Este curso ha pasado por un proceso de prueba. En el cual han participado 2.500 voluntarios. Este ha sido elogiado por especialistas y quienes lo han completado, según Hald. “Los datos son claros: el programa funciona”, ha dicho Gert Martin Hald . “En 13 de 15 casos, tuvo un efecto positivo moderado a fuerte en la salud mental y física y condujo a menos ausencias del trabajo. Después de 12 meses, las parejas se comunicaban entre sí como si no se hubieran divorciado “.
